Firmeza en la Verdad del Evangelio
📖 Devocional: Firmeza en la Verdad del Evangelio
Texto base: Gálatas 2:1-6
“Después, pasados catorce años, subí otra vez a Jerusalén con Bernabé, llevando también conmigo a Tito. Pero subí según una revelación, y para no correr o haber corrido en vano, expuse en privado a los que tenían cierta reputación el evangelio que predico entre los gentiles. Mas ni aun Tito, que estaba conmigo, con todo y ser griego, fue obligado a circuncidarse; y esto a pesar de los falsos hermanos introducidos a escondidas, que entraban para espiar nuestra libertad que tenemos en Cristo Jesús, para reducirnos a esclavitud, a los cuales ni por un momento accedimos a someternos, para que la verdad del evangelio permaneciese con vosotros. Pero de los que tenían reputación de ser algo (lo que hayan sido en otro tiempo, nada me importa; Dios no hace acepción de personas), a mí, pues, los de reputación nada nuevo me comunicaron.”
🪔 Reflexión
Pablo narra un momento clave de su ministerio: subió a Jerusalén, guiado por una revelación de Dios, para confirmar que el evangelio que predicaba no estaba en contradicción con el mensaje de los otros apóstoles. Esto revela su humildad y su deseo de actuar en unidad, pero sin comprometer la verdad.
Uno de los temas centrales aquí es la libertad en Cristo. Algunos intentaban imponer reglas humanas (como la circuncisión) a los creyentes gentiles, pero Pablo se mantuvo firme. El evangelio no es una carga religiosa, sino una invitación a la libertad por medio de la fe en Jesús.
Su firmeza no fue por orgullo, sino para que la verdad del evangelio permaneciera intacta. Hoy, también debemos defender esa verdad: que somos salvos por gracia, no por obras, tradiciones ni rituales.
🙋 Aplicación
-
¿Estás viviendo en la libertad que Cristo te ha dado o te sientes atado por reglas y expectativas humanas?
-
¿Tienes la valentía de defender el evangelio cuando otros intentan distorsionarlo?
-
¿Estás más enfocado en agradar a Dios que en impresionar a personas “de reputación”?
🙏 Oración
Señor, gracias por la libertad que tengo en Cristo. Ayúdame a mantenerme firme en la verdad del evangelio y a no someterme a cargas que Tú no me has impuesto. Dame sabiduría para actuar con humildad y valentía cuando otros quieran pervertir Tu mensaje. En el nombre de Jesús, amén.
Comentarios
Publicar un comentario